Poco o nada se sabe por ahora de Windows 10 para tabletas y teléfonos, se supone que será un gran avance en todos los sentidos. Ahora llega nueva información muy interesante, Windows 10 también se llevará bien con teléfonos y tabletas con procesadores Intel. Esto tal vez deje la puerta abierta a futuros Windows Phone con procesadores Intel, quién sabe. A día de hoy son muchas las tabletas con Windows 8.1 que los llevan en su interior, además desde hace tiempo hay teléfonos Android que llevan un procesador Intel, aunque han pasado bastante desapercibidos.
Mary Jo Foley de ZDNet va más allá, dice que incluso podríamos acabar viendo dispositivos móviles que se pueden convertir en equipos de sobremesa fácilmente. Esto nos recuerda a Ubuntu for Android, un proyecto de Canonical de hace unos años, conectando un teléfono con Ubuntu Touch a una base y dicha base a su vez conectada a un monitor, convertía el teléfono en un equipo de sobremesa corriendo Ubuntu versión para escritorio.
La idea no es ninguna locura, recordemos que Windows 10 adaptará su interfaz dependiendo del dispositivo en el que se ejecute, gracias a Continuum. Lo que hace exactamente es una convergencia perfecta entre la interfaz Modern UI y el escritorio tradicional. Todo esto puede ser muy interesante en equipos convertibles, por ejemplo la Surface Pro 3.
Para todo esto toman especial relevancia las estaciones de carga, algo parecido al dock de la Surface Pro 3, es una base que tiene varios puertos y una salida Mini DisplayPort. Para que os hagáis una idea, tenemos nuestro Windows Phone y cuando llegamos a casa lo conectamos a la base, directamente se transformaría en un equipo de sobremesa conectado a nuestro monitor, a su vez la interfaz cambiaría por completo y mostraría el escritorio clásico.
¿Qué te parece la idea?