Las copias piratas podrán actualizar a Windows 10, pero Microsoft podría poner obstáculos

Fue unas de las noticias más importantes de lo que va de semana. Los usuarios de una copia pirata de Windows 7 en adelante, podrían disfrutar también de Windows 10 sin necesidad de hacerse con una versión original previo pago. Esto ha supuesto un renovado interés en Windows 10, y es que era un problema que Microsoft tendría que atajar tarde o temprano, no por nada una buena cantidad de usuarios a día de hoy sigue contando con una copia pirata en su poder, y si los de Redmond quieren romper la barrera de la fragmentación, tendrán que poner de su parte, por muy a su pesar.

No obstante, desde The Verge nos aseguran que esto no será tan bonito como parece. En primer lugar, aquellos usuarios que actualicen mediante una copia pirata, seguirán teniendo la “etiqueta” de copias no legales o “non-genuine”, por lo que seguirán siendo vigilados por Microsoft y cualquier movimiento de la empresa en el futuro podría afectarles de lleno.

En segundo lugar, aunque estos usuarios pudieran actualizar, desde Microsoft harían todo lo posible por “facilitarles” el acceso a una copia original de Windows 10, a través del nuevo Windows Store que desde Redmond están ya desarrollando. Al igual que en su momento pudimos actualizar de Windows 8 a 8.1 mediante la tienda de aplicaciones, un servidor vería con buenos ojos el hecho de poder tener acceso a la compra del sistema operativo original directamente desde esta tienda, por la cual empezarán a pasar cada vez más usuarios.

Además, los tradicionales avisos por parte de Windows avisando al usuario de que cuenta con una copia no original, el bloqueo de algunas funciones así como la no actualización de algunas partes del sistema, suponen el último recurso de Microsoft para tratar de empujar a todos estos usuarios hacia el lado legal del asunto.

La estrategia, a priori, es bastante interesante. Dejo entrar a todos los usuarios, que aprecien una nueva versión totalmente remodelada, parecida a Windows 7 pero mucho más moderna, con muchas novedades interesantes y adaptada a cualquier dispositivo, y una vez estén dentro, el único camino que se les vaya abriendo es el de comprar una versión original. No sabemos si incluso podrían proponer un período de actualización temporal para estos usuarios, y que tras unos meses, tengan que decidir si hacer uso de nuevo de Windows 7 o sacar la billetera para realizar la compra.

Sea como sea, será un aspecto clave para el futuro de Microsoft con Windows y parece que ya están trabajando de forma notoria para tenerlo atado y bien atado.