Parece que Microsoft sigue depurando los procesos de Windows 10, y ha llegado el turno de mejorar el proceso cuando se produce una actualización importante de Windows 10. Como muchos sabemos, estas actualizaciones son las más esperadas, ya que son las que traen cambios importantes al sistema operativo, tanto en rendimiento como en funciones. Pero la actualización en sí, es un proceso que suele requerir que durante un buen rato no podamos utilizar el ordenador, ya que el sistema está realizando las tareas necesarias para esa actualización.
Con Fall Creators Update, Microsoft quiere mejorar ese tiempo. ¿Cómo quiere hacerlo? Pues, como sabemos, en el proceso de actualización hay dos pasos diferenciados, uno que Microsoft denomina Online y que es el primer paso, en el que se prepara la actualización y en el que se puede seguir utilizando el ordenador. Y, como segundo paso, el proceso Offline que es cuando reiniciamos el ordenador y durante ese proceso no podemos utilizar el ordenador. Es este segundo paso el que Microsoft quiere optimizar, y para ello se están moviendo ciertas tareas al primer paso.
Así, a grandes rasgos, el proceso actual que se realiza es:
Fase Online:
– El ordenador comprueba las actualizaciones (manualmente o automáticamente). – Se descargan las actualizaciones y se comprueban que sean correctas. – Se solicita el reinicio del ordenador.
Fase Offline:
– Al reiniciar, comienza este proceso. – Se hace una copia del contenido de usuario (aplicaciones, configuración, etc.) – Se preparan los ficheros del nuevo sistema operativo (proceso de Windows Image [WIM]) – Se migran los drivers y otros ficheros del sistema operativo. – Se restaura el contenido de usuario al nuevo sistema operativo. – Se reinicia y se termina el proceso.
Pero, con la actualización de Fall Creators Update se quiere que el proceso Offline sea reducido. Por ello, como decimos, se mueven tareas a la fase Online. Así, a grandes rasgos, quedaría como:
Fase Online:
– El ordenador comprueba las actualizaciones. – Se descargan las actualizaciones y se comprueban que sean correctas. – Se hace una copia del contenido de usuario (aplicaciones, configuración, etc.) – Se preparan los ficheros del nuevo sistema operativo. – Se solicita el reinicio del ordenador.
Fase Offline:
– Al reiniciar, comienza el proceso. – Se migran los drivers y ficheros necesarios al nuevo sistema operativo. – Se restaura el contenido de usuario al nuevo sistema operativo. – Se reinicia el ordenado y se termina el proceso.
Como se puede comprobar, se han movido dos tareas importantes al proceso de Online, consiguiendo así reducir el tiempo de indisponibilidad del ordenador. Eso sí, esto hará que notes que pase más tiempo desde que se descarga la actualización hasta que te pide el reinicio, que en las anteriores actualizaciones. Pero esto seguro que nos damos cuenta sólo aquellos usuarios que estamos ansiosos de instalar la actualización, pero la mayoría de ellos, estamos seguros que realizarán el proceso en segundo plano y sin que se den cuenta, por lo que lo que apreciarán es una disminución del tiempo de actualización considerable.
Este método de actualización ya se está aplicando en el programa de Windows Insider, ¿te has dado cuenta de ello?