Huawei parece vivir últimamente subida en una nube. Sus terminales con Android, aunque no son de los más vendidos, gozan del favor de buena parte del público, especialmente en China, su país de origen. Sin embargo, fuera del mercado asiático, las cosas no parecen estar yéndole tan bien. Por eso hay quienes consideran que el recientemente presentado Huawei Ascend P6 es una gran oportunidad de reconciliarse con el gran público. Lo que no nos imaginábamos es que Huawei se estuviera planteando otras estrategias para ganarse su hueco en el Olimpo de los smartphones.
Y es que tras la mencionada presentación del nuevo terminal estrella de Huawei para Android, el CEO de la compañía, Richard Yu, dio una jugosa entrevista para el diario Financial Times cuyo contenido ha dado mucho de qué hablar en las últimas horas. En dicha entrevista el señor Richard Yu habría expresado el interés de Huawei por comprar Nokia, si es que los finlandeses se muestran dispuestos a negociar:
Estamos considerando este tipo de adquisiciones; tal vez la combinación tiene algunas sinergías, pero depende de la disposición de Nokia. Somos de mente abierta.
Lo peor de esto es que los planes de Huawei respecto a Windows Phone tras una hipotética adquisición de Nokia probablemente supondrían una estocada mortal a un sistema operativo que precisamente ahora comienza a dar muestras de estar preparado para competir en las grandes ligas. Según Richard Yu, Windows Phone está en una posición débil pues, al contrario que Android, requiere el pago de una licencia para poder usarlo en los terminales:
Es difícil decir si Windows Phone tendrá éxito o no, pues tiene una cuota de mercado muy pequeña. Windows Phone es débil porque requiere el pago de una licencia. Android es gratis.
Obviando el hecho de que Android no es tan gratis como se asegura que es (que alguien le explique a Huawei qué son las licencias por el uso de patentes en Android, que tan lucrativas están siendo para Microsoft), también se dijo en su día que Android no triunfaría porque iOS había llegado antes al mercado y lo dominaba todo, y fijaos ahora. Pero centrémonos en Windows Phone, que es lo que nos interesa. ¿Habla Huawei en serio o se está marcando un farol?
Personalmente apuesto por lo segundo por varias razones. Primero, ni el gobierno de Finlandia ni la Unión Europea dejarían una de las empresas tecnológicas más importantes de Europa en manos de los chinos. De la actividad de Nokia depende una parte nada despreciable de la economía finlandesa, y ponerla en manos foráneas sería poco menos que un suicidio.
Por otro lado, la propia Huawei reconoce que necesita de la disposición de Nokia a negociar su venta, y nada hace pensar que los finlandeses estén buscando comprador. Es más, aunque la compañía sigue en pérdidas, la adopción de Windows Phone ha logrado revertir la tendencia, y el trato con Microsoft parece que comienza a dar sus frutos. Hay más interés por Windows Phone (que, recordemos, está dominado en más de un 80% por Nokia), y eso se demuestra en el crecimiento continuo que viene experimentando la plataforma en los últimos meses.
Tampoco podemos olvidarnos a Microsoft en esta ecuación. Hoy en día Windows Phone es Nokia y Nokia es Windows Phone. Sin esa asociación, Microsoft no podría sacar pecho con un sistema operativo que, tras apenas 2 años de vida y muchísimas dificultades de por medio, está luchando de tú a tú con BlackBerry por el tercer puesto del mercado. ¿Alguien piensa realmente que Microsoft se va a quedar de brazos cruzados viendo como Huawei compra Nokia para lanzarla en brazos de Android?
Ahora reflexionemos sobre las motivaciones de Huawei para soltar alegremente este titular. Son una empresa que continuamente tiene que luchar contra la etiqueta de “producto chino, producto de baja calidad”. Sabemos que esta etiqueta es falsa. Ni todos los fabricantes chinos son malos, ni todos las marcas no procedentes de China son buenas. Huawei ha dado muestras de saber hacer las cosas con Android, y si no echadle un vistazo al recientemente anunciado Huawei Ascend P6. Bonito, ¿verdad?
Y siguiendo con el Huawei Ascend P6, ¿qué mejor manera de darle publicidad que dar un titular que haga que Huawei esté en boca de todos? Pocas formas mejores hay, la verdad. Recordad una de las máximas del marketing: ”Es importante que hablen de ti, aunque hablen mal”. Parece que en Huawei pretenden seguirlo a rajatabla, aunque para ello tengan que perjudicar la imagen de una plataforma en la que ellos mismos están presentes.
Es precisamente la presencia de Huawei en Windows Phone la que me hace estar más seguro de su farol. Con la presentación oficial del Huawei Ascend W2 a la vuelta de la esquina, atacar al mayor fabricante de terminales con Windows Phone es una estupenda estrategia para, de nuevo, hacerse notar de cara al público. No anuncias que vas a hacer un movimiento que hipotéticamente va a perjudicar un sistema si pretendes triunfar con ese sistema. Sería como dispararse en el pie.
La guinda del pastel la ha puesto la propia Huawei al anunciar en las últimas horas que la compra de Nokia no está dentro de sus planes de futuro. ¿Véis la estrategia? Si os esforzáis, aún podréis escuchar las carcajadas que salen de la sede de Huawei.