Tras el brutal éxito que supuso Wii para Nintendo al introducir nuevas formas de jugar para todo el mundo, Microsoft quiso apuntarse a la moda y en junio de 2009 presentaron Project Natal, lo que más tarde se conocería como Kinect.
En un principio se presentó como una gran revolución para el sector de los videojuegos, y en cierto sentido es cierto que llamó mucho la atención, pero al final sirvió únicamente para ofrecer nuevas formas de jugar en juegos casuales.
En la actualidad el principal uso para Kinect en Xbox One se reduce básicamente a controlar la consola por órdenes por voz y gestos o para desbloquear nuestro PC mediante Windows Hello. Pero con la llegada de las aplicaciones universales a Xbox One, Kinect se puede convertir en un dispositivo muy útil del que sacar partido.
Vía SomosXbox, conocemos de la existencia de esta nueva aplicación llamada Baby Monitor for Kinect, disponible en la tienda de Windows a un precio de 4.99 euros pero sólo para Xbox One.
Mediante esta app, podremos utilizar Kinect en una cámara de vigilancia para nuestro bebé capaz de monitorizar su actividad mientras duerme, todo esto gracias a los sensores de infrarrojos y de movimiento que incorpora Kinect.
En el vídeo que acompaña este artículo, el desarrollador explica en detalle su funcionamiento, aunque en inglés. El funcionamiento es muy simple, las líneas amarilla y verde nos muestran el movimiento en el pecho y el abdomen de la respiración del bebé, y la línea azul sirve de referencia para un punto inmóvil.
Lo realmente interesante viene con su campaña de Kickstarter, ya que quieren recaudar 2.500 dólares para poder ofrecer la posibilidad de emitir la imagen en directo que toma Kinect a cualquier dispositivo, pero todo ello en un circuito cerrado limitado a tu hogar, sin enviar nada por internet.
Sin duda es una idea realmente interesante para cualquier padre o madre que tenga que estar por casa haciendo diferentes tareas, pero quiera saber cómo se encuentra su hijo mientras duerme.
