Microsoft está poniendo todos sus esfuerzos en un sistema operativo (Windows 10) que le permita crear una amplia base de usuarios. Algo fundamental para que los desarrolladores se animen a realizar programas para este sistema operativo de PC e incluso para el móvil. El que sea una actualización gratuita para todos los usuarios de Windows 7 o Windows 8.x es un gran punto a favor, y está consiguiendo que el número de ordenadores con Windows 10 sea cada vez mayor, superando a otros sistemas operativos en muy poco tiempo.
Pero parte del éxito de Windows 10 no es sólo esa actualización, sino los requisitos mínimos tan bajos que requiere. Así, podremos ejecutar Windows 10 en ordenadores con capacidades muy reducidas, permitiendo así estar en tabletas, pero que también nos sirve para que ordenadores de muchos años puedan tener una nueva oportunidad y ejecutar decentemente Windows 10.
Ya os explicamos anteriormente cómo podíamos utilizar un pendrive o tarjeta SD para acelerar Windows 10 pero no hemos querido quedarnos sólo en ese truco. Así que hoy os traemos uno nuevo, en dónde tocaremos las animaciones y aspecto gráfico de Windows 10 para conseguir un rendimiento mayor.
Siguiendo los pasos que os mostramos en vídeo, podréis mejorar el rendimiento de Windows 10 de una forma sencilla desactivando animaciones o efectos gráficos. Lo mejor es que podéis desactivarlos o activarlos al gusto de cada uno, y la marcha atrás es muy rápida.
Así, cómo habéis podido ver en el vídeo, todos aquellos que tienen un ordenador con una potencia gráfica reducida, podéis descargar vuestro ordenador de esas animaciones para que vaya un poco más rápido. Además, en Windows 10, el aplicar el truco y desactivar estos aspectos gráficos no volverá nuestro sistema a un interfaz parecido al de Windows 9x, sino que podréis apreciar cómo ahora los botones e interfaces se mantienen.
¿Conocías este truco para acelerar Windows 10? ¿Conoces algún otro y quieres compartirlo con nosotros? No dudes en explicarlo en los comentarios
