En esta nueva versión de su Sistema Operativo para SmartPhones, Microsoft ha incluido, gracias al uso de WinPhoneRT, el soporte para procesadores de varios núcleos que, aunque no le hizo falta para estar a la altura de iPhone que porta un procesador de doble núcleo en el modelo 4S, sí que es absolutamente necesario si el objetivo es superarlo y tener un amplio margen de crecimiento.
Consecuentemente, con este avance en Windows Phone 8, Microsoft se ha visto en la obligación de aumentar los requisitos de hardware necesarios para los terminales que vayan a montar este Sistema Operativo. Así es que los nuevos terminales llevarán la potencia de los procesadores Qualcomm Snapdragon S4 Plus que tienen una calidad bien contrastada y a muy buen seguro harán que los dispositivos en los que estén montados tengan un gran rendimiento.
En Apple han ido poco a poco mejorando los procesadores de sus dispositivos dado que, gracias a la perfecta integración Software – Hardware, no ha sido necesario introducir grandes mejoras en este aspecto. Actualmente el iPhone 4S que dispone de iOS5 con soporte para procesadores de varios núcleos, monta un procesador Apple 5 “ARM Cortex A9 Doble núcleo a 800MHz”, en comparación con el de un solo núcleo utilizado en el iPhone 4.
Debido a que Android es un Sistema Operativo montado en múltiples dispositivos con muy diferentes especificaciones de hardware, no podemos hablar de un procesador en concreto pero, aunque desde Intel se diga que Android no está bien preparado para esta característica, sí se puede afirmar que soporta procesadores de varios núcleos como en el caso del Samsung Galaxy SIII, buque insignia en la actualidad de los dispositivos con Android y que monta un procesador de cuatro núcleos Exynos de 1,4 GHz
En mi opinión, tanto para Apple con su iPhone que dispone de la mejor integración Software-Hardware, como para Microsoft a partir de Windows Phone 7 y con terminales que cumplen unos requisitos y unas especificaciones bastante estrictas para seguir al iPhone en esta integración Software-Hardware, no ha sido una necesidad crucial el soporte para terminales con varios núcleos sino más bien una opción para crecer, lo que les ha permitido disponer de más tiempo para mejorar otros aspectos como el rendimiento. Sin embargo, para Android, dada la gran cantidad de dispositivos con especificaciones técnicas tan dispares, parece una necesidad debido a que esta diversificación de hardware impide que Android pueda sacar su máximo rendimiento y sea en este aspecto un pequeño lastre lo que no le impide seguir siendo con una diferencia abismal el sistema operativo más extendido en los dispositivos móviles actuales.
Otra característica muy echada en falta en el Windows Phone 7 es la capacidad de poder aumentar la memoria disponible en nuestro dispositivo añadiendo una tarjeta MicroSD. En Microsoft parece que han cedido y, en el nuevo Sistema Operativo Windows Phone 8 han incluido este soporte aunque seguramente mantendrán el control de cómo usar nuestras tarjetas para una mayor seguridad de nuestros terminales.
Aunque siempre con la inclusión de esta característica, aún no se ha incluído en los dispositivos de Apple, con lo que el almacenamiento disponible en iPhone 4S que es el modelo actual está limitado a 16, 32 o 64 GB dependiendo de la versión que hayamos adquirido.
Desde sus inicios Android ha sido más “liberal” que sus competidores y, sobre todo ha estado más cerca de las peticiones de los usuarios con lo que el soporte para tarjetas MicroSD es algo común en los dispositivos que montan este Sistema Operativo.
Aunque en mi opinión no es del todo necesario ya que todas las marcas disponen de almacenamiento en la nube con el que liberar a los dispositivos de esta tarea, sí que me parece obligada de tener por la libertad que ofrece a los usuarios de almacenar sus datos donde deseen y porque no siempre se dispone de conexión a internet para poder descargarlos. Por eso, se agradece que desde Redmond hayan cedido a la presión de los usuarios.
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