El Nokia Lumia 925 ha sido presentado en España hace apenas dos semanas. Se trata del terminal comercializado con mayores prestaciones de Nokia, lo que solemos indicar como buque insignia, y aunque existe un teléfono con código mayor (Nokia Lumia 928) es exclusivo para Verizon mientras que el que os comentamos es de distribución global.
A pesar de la reciente presentación, gracias a Nokia, hemos podido probarlo durante unos días, y traeros este análisis detallado dónde veremos nuestras impresiones y datos objetivos de su funcionamiento. El análisis hemos querido que sea lo más completo posible, tocando los aspectos que más os pueden interesar a la hora de tener en cuenta este terminal cómo una opción para que sea vuestro teléfono inseparable.
La caja en la que recibimos el teléfono es la misma que otros terminales de Nokia. El empaquetado no difiere de otros terminales excepto por su serigrafía externa. Al abrir la caja vemos que se trata del terminal con fondo gris. A simple vista es menos llamativo que cuando abrí la caja del Nokia Lumia 920, pero hay que tener en cuenta que el Lumia 920 era blanco y era de los primeros Lumia que veía. Llaman la atención las franjas laterales negras, que rompen la uniformidad de los laterales, y que sabemos que sirven para mejorar la recepción de la antena y no tener problemas al tener un marco de aluminio. La impresión, desde luego, no puedo decir que haya sido mala o decepcionante, sino sorprendente, ya que tenía una asociación mental muy fuerte de Nokia Lumia y cuerpo unibody de policarbonato.
Al cogerlo, tengo una impresión rara. Acostumbrado a mi Nokia Lumia 920, al coger este terminal, tengo la sensación de que me falta algo. Y es que la disminución de peso se nota y mucho. A esa sensación, también contribuye la disminución del grosor. Le quitamos el plástico protector, y comprobamos cómo la parte trasera es de un color grisáceo mate, pero que resalta bastante con el borde de aluminio. No queda mal, pero de nuevo sorprende, más viniendo de los anteriores Nokia Lumia en los que a pesar de tener carcasas intercambiables estas se disimulaban totalmente en el terminal. Por otro lado, entiendo su uso, y no utilizar todo el color de aluminio brillante, ya que cualquier golpe o arañazo se notaría mucho más, que en el que trae.
Procedemos a insertar la tarjeta micro-SIM con la ayuda del correspondiente clip que trae para ello, y procedemos al arranque del teléfono. Aparece el logo de Nokia, y posteriormente Windows Phone, comenzando el asistente de Windows Phone 8. En todo este paso, no hay nada que reseñar excepto que al utilizar mi cuenta de Microsoft el terminal me reconoció la copia de seguridad de mi anterior teléfono, permitiendo restaurar aplicaciones, mensajes, etc. de una sola vez. Un punto a favor de Microsoft, ya que siempre había restaurado sobre el mismo teléfono, pero no sobre otro terminal.
Por cierto, en la caja, junto al terminal, podréis encontrar un cargador con puerto USB, un cable USB que puede utilizarse para el cargador, o para conectar al ordenador para la sincronización de datos, y unos auriculares de calidad estándar. Además viene un pequeño manual, pero vamos, reducido a su mínima expresión. Todos los accesorios son de color negro.
Especificaciones | Nokia Lumia 925 | |
---|---|---|
Dimensiones | 70,6 mm de ancho x 129 mm de alto x 8,5 mm de grosor | |
Peso | 139 gramos. | |
Batería | Capacidad de 2000 mAh | |
Pantalla | Tecnología AMOLED. 4,5 pulgadas. ClearBlack. PureMotion HD+. Corning Gorilla Glass 2. Polarizada. Alta sensibilidad. Resolución de 1.280×768 píxeles | |
Teclas Físicas | Cámara, encendido y volumen en lateral derecho. En la parte inferior las teclas de búsqueda, inicio de Windows y atrás | |
Conectores | Micro-USB para la carga y conexión de datos. Conexión de audio de 3,5 milímetros. | |
Procesador | Snapdragon S4 doble núcleo a 1,5 Ghz | |
Memoria | 1 GB de memoria para ejecutar las aplicaciones. Además de 16GB de almacenamiento que no puede expandirse mediante tarjeta | |
Cámara | Sensor de 8,7 megapíxeles PureView, con lente Carl Zeiss Tessar, y flash LED dual. Apertura de f/2.0. Estabilizador de imagen óptico | |
Conectividad inalámbrica | Bluetooth 3.0, NFC (comunicación de campo cercano), Wi-Fi a/b/g/n, GPS+Glonass y soporte de 2G, 3G y LTE. Carga inalámbrica mediante carcasa adicional. | |
Sistema operativo | Windows Phone 8 GRD2 |
Como hemos comentado, el lanzamiento en España ha sido muy reciente, y aunque todas las principales operadoras se han comprometido a que lo tendrán disponible, algunas de sus webs no están actualizadas.
El teléfono podemos encontrarlo disponible para cada una de las tarifas que Vodafone posee. Hay que recordar que en este caso se trata del modelo exclusivo con 32Gb de capacidad.
Dependiendo de la tarifa a contratar, el precio variará. Así tenemos:
– Tarifa Base: 129 euros + 384 euros añadido tarifa + IVA =620 euros – Tarifa Base2: 129 euros + 384 euros añadido tarifa + IVA = 620 euros – Tarifa Base3: 79 euros + 384 euros añadido tarifa + IVA = 560,23 euros – Tarifa RED: 0 euros + 384 euros añadido tarifa + IVA = 464,64 euros – Tarifa RED2: 0 euros + 384 euros añadido tarifa + IVA = 464,64 euros – Tarifa RED3: 0 euros + 384 euros añadido tarifa + IVA = 464,64 euros
Estos precios son máximos, y si su contratación se realiza por la web, hay que tener en cuenta que se realiza un descuento del 25% durante los seis primeros meses.
Movistar hace tiempo que ya no subvenciona terminales, pero lo que sí hace es aplazar el pago de la compra del terminal junto con una tarifa Fusión. Así, si lo compramos con ellos, el terminal nos saldrá por 580,80 euros con el IVA incluido.
Orange también hace tiempo que no subvenciona terminales y también aplaza el pago, o incrementa el precio de sus tarifas, cómo hace Vodafone. No se ha encontrado información oficial en su web todavía ya que han indicado que retrasan su lanzamiento hasta Agosto, pero según datos publicados durante el anuncio el precio sería de mínimo 14 euros mensuales, más el IVA. Pero no conocemos exactamente con qué tarifas sería a las que aplicaría el sobrecoste.
Para todos aquellos que quieran adquirirlo sin tener que estar atado a una operadora, tenemos malas noticias. Y es que Nokia no va a comercializar el terminal en formato libre por ahora, por lo que o lo compramos a través de una operadoras, o nos tendremos que esperar varios meses.
El Nokia Lumia 925 rompe un poco con la estética que nos tenía acostumbrados Nokia en toda su gama Lumia. Hasta ahora, se nos presentaban unos teléfonos que, o eran de tipo unidoby, o aunque tenían carcasa, esta encajaba en el terminal como un guante, dando la sensación de uniformidad y robustez por otro lado.
Como decía, el Nokia Lumia 925 rompe esa tendencia por dos razones. La primera, porque Nokia ha utilizado el aluminio como parte de la fabricación (lateral del teléfono) y ahora se rompe la uniformidad debido a su parte trasera de un color diferente a los laterales. Aun así, la sensación de robustez se sigue manteniendo, ya que no existen piezas que se muevan, o encajen mal.
Como suele ocurrir con los Nokia Lumia, el número de conectores se reparten casi de la misma forma. En el lateral derecho tenemos los botones de encendido, volumen y cámara. Y en la parte superior tenemos el espacio para la SIM, la toma de auriculares, el conector micro-USB para la carga o datos, y el micrófono para sonido ambiental y poder realizar cancelación de ruido. En la parte inferior, pero no del teléfono, sino de la pantalla, veremos el micrófono, y en el lateral izquierdo no tenemos ningún conector.
Sorprende que el conector micro-USB se encuentre en la parte superior, y no en la inferior, como ha ocurrido con el resto de terminales de la gama Lumia. Esto puede parecer irrelevante, pero si alguien tiene un soporte con micro-USB para cargar un teléfono, debe olvidar de usarlo, a no ser que quiera colocar el teléfono al revés. Esto se solucionaría elegantemente si utilizamos carga inalámbrica, pero para ello es necesaria una carcasa que otorga al terminal de esa capacidad ya que el terminal no la incorpora de serie.
Esta carcasa realizaría la carga del terminal por unos conectores que tiene el terminal y que podemos ver en la parte trasera del terminal. Se encuentran junto al altavoz (que se encuentra en la parte inferior) y que comentaremos que, además de los agujeros pertinentes, tiene un detalle para que al poner el teléfono sobre una mesa el altavoz no quede pegado y por lo tanto perder volumen. Y es que, a cada lado, tiene dos pequeñas bolitas de plástico que separan la mesa donde se apoya del altavoz. Además ayudan a que el teléfono no esté tan inclinado ya que, como habréis podido comprobar, la cámara sobresale bastante por la parte trasera. También podemos apreciar en la parte trasera, al lado de la cámara, el doble flash LED del que dispone.
Podemos decir que el teléfono es manejable en tamaño y en peso. Se agarra muy bien, no siendo tan resbaladizo como puede ser un Nokia Lumia 920 o Nokia Lumia 720. Los botones se sienten de alta calidad y no tienen holgura ni sobresalen en demasía. Además, son del mismo color aluminio, por lo que se disimulan muy bien.
El microprocesador incorporado por el terminal, es el más potente soportado hoy por hoy por Windows Phone 8. Junto con el GB de memoria, nos da una combinación hardware que mueve Windows Phone 8 con mucha soltura, además de poder abrir aplicaciones y juegos sin despeinarse. Si lo comparamos con otros terminales de otros sistemas operativos puede parecer poca potencia, pero ya sabemos que una de las características de Windows Phone es la gran optimización realizada, por lo que conseguimos muy buenos rendimientos, con microprocesadores de menor potencia, y por lo tanto, menor consumo de batería.
Por otro lado, respecto a la capacidad, nos encontramos con un modelo que tiene 16 GB de memoria interna para almacenamiento, de los cuales 1,9GB están ocupados por el sistema operativo. Dispositivos con otros sistemas operativos tendrían mucha menos capacidad disponible, pero si lo unimos a que no puede ser ampliada mediante tarjetas SD, puede que se quede corto e insuficiente para un terminal de gama alta. Más cuando el punto fuerte del teléfono es la toma de fotografías y vídeo. Os adjuntamos la ocupación del terminal de pruebas, con las aplicaciones que normalmente uso y una semana aproximada de uso.
Si lo que queremos es mayor capacidad, debemos optar por el terminal que vende, por ahora, en exclusiva Vodafone, ya que tiene una capacidad de 32GB. En ese caso, la limitación respecto a la capacidad se relaja bastante, ya que permite tener un almacenamiento con bastante holgura.
Respecto a la conectividad, viene con lo que nos tiene ya acostumbrado Nokia en su gama alta. El móvil lleva incorporado Bluetooth 3.0 y Wi-Fi que soporta los estándares a/b/g/n permitiendo así velocidades elevadas de conexión. También lleva incorporado NFC ayudando así a compartir información, enlazar dispositivos, o abrir aplicaciones.
Soporte de redes móviles de 2G (850, 900, 1800 y 1900 MHz), con soporte de GPRS y EDGE. Redes móviles 3G (850, 900, 1900, 2100 MHz) con HSDPA y HSUPA pudiendo alcanzar los 42,2 Mbps de bajada y los 5,76 Mbps de subida. Y, por supuesto, soporta LTE en cinco bandas de frecuencia, pudiendo llegar a los 100 Mbps de bajada y a los 50Mbps de subida.
El soporte de LTE empieza a ser imprescindible en los terminales de gama alta, ya que, como sabréis, ya ha comenzado el servicio por parte de varias operadoras en España, Vodafone (ya hicimos un análisis exhaustivo), Orange y en breve Yoigo. Aunque nos falta una de las más importantes, como es Movistar.
Este apartado es uno de los que hay que destacar en este terminal. Si ya estábamos contentos con la pantalla incorporada en el Nokia Lumia 920, podemos decir que Nokia incluso la ha mejorado. Su tecnología ha cambiado, siendo ahora una pantalla AMOLED y se nota. Podemos notar cómo el negro es completamente negro, a pesar de la alta luminancia que tiene la pantalla, y cómo los colores son mucho más vivos. Yo suelo llevar el terminal con los live tiles en rojo y cuando lo comparaba con la pantalla del Lumia 920, parecía que los de éste último eran de color naranja, no rojo.
Nokia además ha incorporado en su actualización Amber, una configuración especial de la pantalla, permitiendo que cada usuario configure la saturación y la tonalidad a su gusto. De esa manera, aquellos que no les gusten los colores tan saturados de una pantalla AMOLED, siempre podrán configurarla. Y viceversa, claro.
Tenemos que hablar también de su comportamiento en el exterior y ante el sol. Aquí podemos asegurar rotundamente que el comportamiento es excelente. El cristal de la pantalla intenta limitar los reflejos, y la propia pantalla, a plena luminancia, permite utilizar el móvil perfectamente aunque le dé el sol de lleno. Os pongo un ejemplo.
Pero no todo iba a ser bondades. Se nota que el pulido de la pantalla es menor y acostumbrado al Lumia 920, al principio, el deslizar el dedo por la pantalla cuesta un poco. Además, notamos que se ensucia más que la pantalla del anterior móvil. Esto puede ser motivado por una disminución de la protección de la pantalla del terminal para conseguir un menor peso. Ahora, si el terminal lo dejas en una superficie inclinada, con la pantalla hacia abajo, veréis que no se desliza.
También hemos notado que los movimientos en la pantalla son menos nítidos. A pesar de indicar que se tiene la tecnología PureMotion HD+, se nota que al desplazar texto por la pantalla de forma rápida, el texto se ve más borroso que en un Lumia 920. No es algo preocupante, pero sí que aquellos que cambien desde este terminal, lo notaréis.
No podemos dejar de comentar una de las principales novedades de este terminal, y que en breve se ampliará a más terminales Lumia, y es la nueva pantalla de bloqueo. Una pantalla en la que se informa de la hora y alguna información adicional, como cuando el terminal está cargando, con poca batería, en modo vibración, etc. Y tampoco olvidar el poder activar el móvil con un doble toque en la pantalla. Son dos funciones que han tenido que pasar unos días para acostumbrarme. Por un lado, cuando le daba al botón de apagado del móvil, no me acostumbraba a que apareciera la hora, y tenía la sensación de que estaba encendido y la tentación de volver a darle otra vez al botón de apagado. Pero una vez que te acostumbras, es muy cómodo, ya que no tienes que encender el teléfono para ver la hora. Por otro lado, como usa el sensor de proximidad, si quieres conocer la hora y lo llevas en el bolsillo, es tan sencillo como sacarlo. El terminal detecta que no está en el bolsillo y pone la hora en la pantalla. Consultas la hora y de vuelta al bolsillo. No hace falta encenderlo.
Como hemos comentado, además, el terminal se activa con doble toque en su pantalla. Sí, aunque parezca que esté apagado y no ponga si quiera la hora, podéis activarlo con un doble toque. Muy útil si el terminal está sobre una mesa, y queréis consultar de forma rápida si tenéis algún aviso, o notificación. Por otro lado, gracias a una reciente actualización de la pantalla de bloqueo nueva, es posible activar momentáneamente el reloj con sólo pasar la mano por encima del teléfono y sin tocarlo. Y todo ello, cómo veremos más adelante, sin aparente impacto en el consumo de batería.
Por supuesto, recordar que el terminal incluye alta sensibilidad en su pantalla. Por lo que podremos utilizarla con guantes. Muy útil para el invierno. Por tanto, podemos concluir que Nokia ha mejorado considerablemente la pantalla en este terminal, siendo uno de los puntos donde destacará sobre otros modelos.
Entramos en uno de los apartados que seguro que muchos de vosotros tendréis más en cuenta, ya que es uno de los puntos fuertes de este terminal y que Nokia anuncia a bombo y platillo. Cómo ya habéis visto, yo soy un asiduo usuario de un Nokia Lumia 920, por lo que iba a analizar los resultados de esta cámara con lupa. Y no me ha defraudado. Se notan ciertas mejorías en las fotos, sobre todo en el tratamiento de las imágenes y en cómo se obtienen fotografías con bastante luz.
Pero para salir de dudas, mejor veamos unos ejemplos:
Comenzamos con una fotografía realizada en un escenario dónde tenemos zonas de sombra, y zonas donde está incidiendo directamente el sol. Este tipo de fotografías son complicadas porque hay una gran variedad de iluminación. El resultado es muy aceptable, pudiendo comprobar cómo los negros y zonas oscuras permanecen así, y las zonas iluminadas no están saturadas.
Continuamos con una fotografía en el interior del teatro, donde el resultado es también bastante bueno. El balance de blancos es correcto y la saturación de color adecuada a pesar de la poca luz. Se aprecia cierto grano, sobre todo en el rojo del telón y de las butacas.
Y continuamos con otra fotografía con poca luz, y en donde tenemos alguna zona un poco más iluminada. Además, se han escogido objetos llenos de color para apreciar la saturación. En este caso, el resultado es muy bueno, ya que la fotografía no refleja la situación en la que fue tomada (había muy muy poca luz) y aun así, el color tiene una saturación muy buena.
En los vídeos, es donde mejor podemos ver la calidad de esta cámara, trabajando conjuntamente la calidad del sensor y el estabilizador óptico incorporado y mejorado en una lente adicional al incluido en el Nokia Lumia 925. El vídeo que os ponemos de muestra podéis ver cómo el móvil compensa las vibraciones del coche consiguiendo un vídeo fluido y sin movimientos bruscos (fijaos cómo vibra el coche en la parte inferior derecha, pero el vídeo no se inmuta). Además, podéis comprobar que la velocidad del vídeo es buena, y que la calidad se mantiene a pesar del movimiento.
El altavoz externo del terminal, que como hemos visto, se sitúa en la parte posterior del terminal, tiene una calidad justa. Lo suficiente para escuchar las notificaciones, los tonos de llamada y algún vídeo. Pero no le pidamos mucho más, y si queréis tener ya una calidad, debéis cambiar a unos auriculares. Pero no a los que nos trae Nokia de serie, ya que estos también son de calidad estándar, sino a otros auriculares de mayor calidad. Por supuesto, el terminal soporta auriculares con el conector Jack estándar, o conectados por Bluetooth. Es más, si nuestros auriculares lo soportan, podemos utilizar el NFC para enlazarlos al teléfono. El terminal, al igual que otros modelos de gama alta de Nokia, trae mejoras específicas del audio, como un ecualizador configurable, nivelación de audio y soporte de auriculares Dolby, aumentado así la calidad.
Gracias a que el Nokia Lumia 925 viene con la actualización Amber (Windows Phone 8 GDR2, más actualizaciones de Nokia) hemos podido probar la radio en Windows Phone 8. La funcionalidad es exactamente igual que la que se tenía en Windows Phone 7.x, con el mismo simple interfaz y el acceso a través de la aplicación de Xbox Música.
Si hablamos del audio de las llamadas, tenemos que comentar que se ha notado una mejora respecto a otros terminales. El audio de las conversaciones se escucha muy nítido, y con más detalle. El volumen es correcto, no teniendo que subirlo hasta el máximo para poder escuchar la conversación. También hemos podido probar el terminal en entornos ruidosos y, a pesar de ello, nos escuchan con bastante nitidez, por lo que el micrófono auxiliar realiza una buena función permitiendo cancelar el ruido ambiente al terminal.
El terminal cuenta con la misma batería de 2000 mAh que se dispone en el Nokia Lumia 920. Es de agradecer que para reducir el peso del terminal no hayan optado por reducir la capacidad de la batería, ya que si no, podría convertirse en un punto negativo del terminal. Sin embargo, hemos notado que esa capacidad es suficiente para tener disponible el terminal de forma holgada durante todo un día.
Uno de los aspectos que más reticencia tenía era el consumo debido a la nueva pantalla de bloqueo, de la que hemos hablado anteriormente. Pues bien, no he notado ningún consumo exagerado en el terminal cuando estaba o no activada esa función, por lo que nos lleva a pensar que Nokia ha optimizado y mucho su uso, y que no sólo ha tenido en cuenta la funcionalidad que puede traernos, sino que la duración de la batería no se vea impactada.
El uso que le he dado al terminal durante este tiempo de prueba ha sido igual que el que tenía con mi anterior teléfono. Es más, le he instalado exactamente las mismas aplicaciones, para que así esté en las mismas condiciones. Por tanto ha tenido varias aplicaciones de mensajería, como WhatsApp, Line, Talk.to, Messenger, etc. Y por supuesto, uso de redes sociales como Facebook y Twitter.
Aquí se aprecia, como al llegar al final del día, el terminal todavía tiene carga suficiente y ni siquiera ha llegado a activar el modo de ahorro batería (cuando baja del 20% de carga). También destaca que el consumo es bastante lineal, no produciéndose saltos bruscos, lo que nos lleva a pensar que se ha mejorado tanto la gestión de la carga de la batería, como el propio consumo en el terminal. Esperemos que esté relacionado con la actualización Amber y que pronto podamos disfrutar de ello en el resto de Nokia Lumia.
Hay que comentar que el cargador que viene con el terminal es de mayor amperaje que el provisto con otros terminales. Esto hace que el tiempo de carga del terminal se reduzca un poco, lo cual es de agradecer.
Respecto al sistema operativo, no habría que comentar demasiado, a no ser porque el terminal incorpora la futura actualización de Windows Phone 8, la denominada por Microsoft como GDR2, y por Nokia como Amber. Así, hemos podido comprobar cómo se han incorporado varias novedades, como la nueva pantalla de bloqueo, DataSense (anunciado en la presentación de Windows Phone, pero sólo disponible en un limitado número de países), posibilidad de utilizar la radio, control del color para la pantalla, sincronización CardDav y CalDav, y otros detalles menores.
No puedo dejar de mencionar la aplicación DataSense. Que se encargará de indicarnos el consumo de datos realizado en el teléfono, tanto de forma general, como el detalle por aplicación. Además incorpora un Live Tile por el que de un sólo vistazo podemos conocer el consumo y cuánto nos queda para llegar al límite. Límite configurable, y según el cual, la aplicación nos podrá avisar cuando estemos cerca, y entrar en un modo de bajo consumo de datos. Desde luego, una aplicación totalmente necesaria en un sistema operativo como es Windows Phone.
92
<
p> Nokia ha querido realizar una actualización de su anterior terminal estrella, que fue el Nokia Lumia 920. Para ello ha mejorado en peso, grosor, pantalla, incluso en la cámara. Pero no todo se consigue gratis. Ha tenido que dejar por el camino la carga inalámbrica y cambiar su aspecto, pasando de un cuerpo uniforme de policarbonato a utilizar el aluminio y perder la uniformidad del terminal. El primer punto se puede solucionar incorporando una carcasa con carga inalámbrica (pero claro, ya aumentamos el peso y volumen) y el segundo punto podemos decir que es sólo algo estético. Que puede gustar o no.
Aparte de la falta de la carga inalámbrica, echamos de menos algo de más capacidad, ya que 16Gb en un terminal como éste, y sin posibilidad de ampliación mediante tarjeta SD, se nos hace escaso. Siendo este dato, uno de los pocos puntos grises que podemos encontrar en este terminal. Eso sí, si queréis tener capacidad de sobra, os tendréis que decantar por ahora por la versión que comercializa Vodafone que sí incorpora 32GB.
En resumen, podemos decir que el Nokia Lumia 925 es casi lo que debería haber sido el Lumia 920 en su día, siendo una actualización necesaria por parte de Nokia y mantenerse al día en la lucha de terminales.
Nokia | Nokia Lumia 925