Evita que tu equipo descargue automáticamente la actualización a Windows 10

Windows 10 está creciendo a un ritmo realmente excelente tal y como nos demostraron los datos sobre lo que ocurrió durante su primer mes de vida. La última versión del sistema operativo de escritorio de Microsoft llegó en un mes al mismo punto que a Windows 8 le costó ocho meses alcanzar, con un uso del 5% a nivel global. Los jugadores de PC también dieron el salto en masa, pasando a contar con una presencia del 17% durante los primeros 30 días de vida.

Actualizar a Windows 10 es realmente sencillo, de hecho los usuarios de Windows 7 y Windows 8.1 pueden dar el salto y obtener una copia gratuita de por vida, aunque solo si deciden hacerlo antes de que pase un año desde la salida al mercado del sistema operativo. Para ello, si contamos con todas las actualizaciones, el propio sistema nos informará de que tenemos la posibilidad de pasar a la última versión de Windows de forma gratuita, y con un par de clics estará lista.

Sin embargo no todo el mundo está listo para dar el salto y prefiere esperar a ver cómo lo reciben el resto de los usuarios, así como sus opiniones, y de paso que corra el tiempo para que se vayan arreglando pequeños problemas que puedan surgir. Sin embargo, tal y como ya os comentamos, parece ser que Windows 10 se descarga de forma automática en todos los equipos con Windows 7 o Windows 8.1 que estén listos para la actualización, sin pedirle permiso al usuario, aunque por lo menos no realiza la instalación a no ser que el usuario así lo solicite. Pero esto conlleva un gasto en la conexión a Internet, que en el caso de conexiones de uso medido puede suponer un problema muy serio pues estamos hablando de una descarga de hasta 6GB, además de un espacio que se está ocupando innecesariamente.

Impedir la descarga automática

Antes de ponernos a impedir que Windows 10 se descargue de forma automática, tendremos que comprobar si nuestro equipo con Windows 7 o Windows 8 ya ha realizado la descarga sin que nos diésemos cuenta. Para ello simplemente habrá que ir hasta el Panel de Control, acceder a las Opciones de Carpeta y la zona de configuración avanzada, seleccionar la opción “Mostrar archivos, carpetas y unidades ocultas”, pues la carpeta que contiene la descarga está oculta.

Ahora solo queda ir a la unidad de instalación donde esté vuestro sistema operativo (normalmente C:) y ver si en la raíz del disco duro encontramos una carpeta llamada $Windows.~BT. En caso de estar ahí, veremos como dependiendo de si la descarga se ha completado o está a medias, ocupará entre 3GB y 6GB, mientras que si no está significa que nuestro equipo todavía no ha descargado la actualización. Independientemente de tu situación no hagas nada, no intentes borrarla todavía.

Antes de eso vamos a asegurarnos de que Windows no vuelva a descargar esta actualización sin nuestro permiso. Para ello solo hay que ir hasta el panel de control y abrir la lista de programa instalados (“Agregar o quitar programas” o “Programas y características” dependiendo de la versión que tengamos). A continuación, haz lo siguiente:

– En la parte izquierda haz clic sobre Ver actualizaciones instaladas – Busca las siguientes actualizaciones: – Si tienes Windows 7 Service Pack 1: KB3035583, KB2952664, y KB3021917 – Si tienes Windows 8.1: KB3035583 y KB2976978 – Haz clic derecho y escoge la opción Desinstalar sobre cada una de ellas – Si te pide que reinicies indica que lo harás más tarde – Cuando hayas terminado de eliminarlas, reinicia tu equipo

Ahora que las actualizaciones indicadas ya están eliminadas, hay que decirle a Windows Update que no queremos que las vuelva a instalar. Para ello, vamos a Panel de Control, accedemos a Windows Update y hacemos clic en Buscar actualizaciones. Ahora haz clic donde indica “X actualizaciones importantes” y aparecerán las que hemos borrado antes, o simplemente una llamada “Actualización a Windows 10”, en cualquier caso hay que hacer clic derecho sobre cada una de estas e indicar que no queremos que se vuelva a mostrar.

Por último, para liberar el espacio que esté ocupando la actualización a Windows 10 en caso de que se haya descargado previamente, podemos utilizar la herramienta “Liberador de espacio en disco”. Puedes buscarla manualmente o abrir la ventana Ejecutar e introducir cleanmgr /sageset:11 para que esta utilidad de Windows se inicie, y una vez dentro veremos una serie de opciones para marcar, que son los archivos que podemos eliminar para liberar espacio. Una de estas opciones será “Archivos de instalación temporales de Windows”, aunque podemos seleccionar tantas como queremos para realizar una limpieza mayor.

Tras darle a aceptar el sistema comenzará a eliminar todo lo que hayamos indicado, y tendremos nuestro equipo libre de archivos que ocupan espacio innecesariamente, y la posibilidad de que la actualización a Windows 10 se descargue automáticamente desactivada. Cabe mencionar que cuando estés listo para dar el salto a la nueva versión del sistema operativo de Microsoft, tendrás que ir de nuevo al Panel de Control, entrar en Windows Update y acceder a la opción de Restaurar actualizaciones ocultas, para permitir que se descarguen de nuevo.