Windows 10 Mobile es la nueva versión del sistema operativo móvil de Microsoft que aparecerá en el mercado en el mes de noviembre junto con los terminales Lumia 550, Lumia 950 y Lumia 950 XL, mientras que llegará en forma de actualización al resto de usuarios en el mes de diciembre. Con ella y junto a todas las novedades que llegarán, la compañía espera poder darle el impulso que necesita su plataforma.
Sin embargo, esto no quiere decir que Microsoft, como compañía que también provee servicios, no pueda trabajar en soluciones para otras plataformas. De hecho, es algo que ya hemos visto con ejemplos como el de Cortana para Android o la aparición de Microsoft en la keynote de Apple para hablar sobre cómo funcionará Office en el nuevo iPad Pro, siendo evidente que los de Redmond pueden trabajar en otros proyectos sin problema.
Ayer algunos medios se hacían eco de una noticia en la que indicaban que Microsoft está trabajando con Cyanogen en prepara su propia versión de Android, algo de lo que no existe ninguna prueba y que el medio TheInquirer parece haberse inventado. Pero si hubiese sido cierto tampoco debería sorprendernos ya que si repasamos los últimos movimientos entre ambas compañías veremos un acercamiento después de que Cyanogen decidiese alejarse de Google, o de que Satya Nadella se reuniese con el equipo de desarrollo, de lo que finalmente surgió una alianza entre ambas compañías. Pero, ¿qué pasaría si se diese esta situación?
Estoy casi seguro de que si algún día esto se hiciese realidad muchos pensarían que Microsoft no está haciendo todo lo que puede con Windows 10 Mobile y que está destinando demasiados recursos a otras plataformas, pero la realidad es que estas dos cosas no tiene ninguna relación. Los de Redmond podrían permitirse perfectamente trabajar por una parte en los productos para los usuarios de su propio sistema y al mismo tiempo dedicarse a otros proyectos.
Hay que tener muy claro que Microsoft es una compañía que también provee servicios sin diferenciar a los usuarios según qué teléfono o dispositivo tengan, ya que esto es lo mejor que se puede hacer cuando el objetivo es llegar a tantos como sea posible. De no hacerlo así se estarían cerrando puertas a nuevas oportunidades, y se dejarían pasar muchos clientes potenciales que podrían querer hacer uso de dichos servicios.
La justificación de que Microsoft lo haría porque Windows Phone actualmente no tiene interés ni una cuota de usuarios considerable tampoco sería válida, puesto que de haber actuado bajo este mismo razonamiento Microsoft nunca habría dedicado tiempo a permitir que Office o OneDrive estén disponibles también en Mac OS, cuando Windows es el rey por excelencia en el escritorio en cuanto a cantidad de usuarios
En el ámbito de Android las ROM de Cyanogen son bastante conocidas y una alianza con Microsoft podría dar lugar a una versión creada con la visión de ambas compañías, que integre todos los servicios y aplicaciones que los de Redmond han estado creando hasta la fecha. No me refiero solo a Cortana, sino también a lanzadores de aplicaciones o software para modificar la funcionalidad del bloqueo de pantalla.
De este modo, y dado que Cyanogen ya dijo que en sus propias ROMs no se instalarían por defecto los servicios de Microsoft, una hipotética versión de Android sí podría integrarlos por defecto contando así con Cortana, OneDrive, Office, y aplicaciones propietarias publicadas en Google Play, como Arrow Launcher, o el marcador de llamadas con funciones de TrueCaller que os contábamos hace poco, entre otras.
Al fin y al cabo, si decidiesen crear una versión de Android con un buen rendimiento y un diseño que guste a los usuarios de la plataforma de Google, el resultado podría suponer un aumento en los usuarios de los servicios de los de Redmond. Y además, esta noticia seguro que no sentaría nada bien a los de Mountain View, ya que si recordamos Cyanogen decidió crear una versión de Android completamente libre, algo que no podría lograr sin desvincularse de Google dado que a más integradas están sus aplicaciones en el sistema, menos opciones se da a los desarrolladores.
Independientemente de si tendría sentido o no que Microsoft desarrollase su propia versión de Android, la pregunta de si esto tendría algún interés para los usuarios es todavía más importante. Y es que si algo hemos visto en el pasado es que el intento de lograr hacerse un hueco con una estrategia de este tipo por parte de Nokia, con el llamado Nokia X, fue un fracaso absoluto que los de Redmond acabaron borrando del mapa.
Primero fue el Nokia X, y tras él aparecieron los Nokia X+ y Nokia XL, mientras que ya se esperaba la llegada del Nokia X2 que sería el último de este experimento. Todos estos terminales llevaban lo que la propia compañía llamaba Nokia X Sotfware Platform 1.0 que no deja de ser un fork de Android, es decir, un sistema operativo alternativo pero que en esencia lleva el núcleo de Android en su interior, aunque visualmente no se parezca en nada.
A nivel de interfaz este sistema operativo contaba con tiles, pero no live tiles como en Windows Phone, ya que simplemente eran cuadrados sin animar, que podían mostrar información a través de ellos. Además, se hacía uso de los widgets de Android y a nivel de aplicaciones contaba con la llamada Tienda de Nokia, que tenía más de 60.000 aplicaciones desde el primer día entre ellas las más usadas, pero que no hacía uso directamente de Google Play lo cual ya planteaba un gran problema desde el principio.
Dejando de lado si este proyecto se llevó a término de forma correcta o incorrecta, considero que si Microsoft hubiese querido tener presencia en el mercado con Android no habría cancelado el proyecto que Nokia inició y de haber querido cambiar determinados aspectos lo habría hecho. Pero claro, también está la posibilidad de que quisieran volver a intentarlo haciendo bien las cosas, aunque recordemos que Satya Nadella ya estaba al frente de Microsoft cuando este proyecto se canceló, por lo que me resultaría difícil creer que al menos bajo su mando esto vaya a ocurrir, y que haya gente realmente interesada en algo así.