Como todos los meses, Kantar nos ofrece los datos estadísticos sobre el procentaje de ventas a nivel mundial de todos los sistemas operativos móviles. En el último reporte del mes de enero, ya quedaba patente que Windows en teléfonos estaba cayendo estrepitosamente.
El silencio de Microsoft en cuanto a novedades para Windows 10 Mobile en un futuro, junto con la inexistente presencia de nuevos teléfonos que animen el catálogo han propiciado la caída de confianza en el sistema, causando que sus ventas bajen considerablemente.
Tanto Android como iOS se ven beneficiados casi por igual en el reparto de usuarios que abandonan Windows. En algunos países como por ejemplo China, Japón o Australia, Android ha sufrido un crecimiento realmente elevado.
Sin embargo, iOS no se queda atrás, logrando un crecimiento considerable en países como Alemania, Gran Bretaña o Francia. Aunque su cuota general de ventas siempre queda por debajo de la de Android, pero como todos sabemos es debido al elevado precio que tiene el iPhone.
Windows baja en todos los países y regiones, salvo sorprendentemente Japón, donde ha crecido un 0.8% con respecto al mes de febrero de 2016. Probablemente gracias a un gran número de teléfonos de fabricantes japoneses que salieron a lo largo del año 2016.
La cuota de ventas es más que probable que siga bajando aún más, sobretodo tras la confirmación por parte de Microsoft de que muchos terminales con Windows 10 Mobile no recibirían Creators Update, repitiéndose una vez más la historia que ya vivimos con el paso de Windows Phone 8.1 a Windows 10 Mobile.
Además, por si dicho movimiento no hubiera podido generar suficiente polémica entre los usuarios de la plataforma, Microsoft también ha decidido retirar la posibilidad de actualizar de Windows Phone 8.1 a Windows 10 Mobile mediante la aplicación del Asesor de actualizaciones.
Es una lástima ver en lo que está quedando finalmente Windows 10 Mobile, después de muchos años donde realmente muchos pensábamos que podría ser una alternativa real a iOS y Android.
Quizás si Microsoft hubiera seguido la estrategia de Nokia de lanzar bastantes terminales al año, la cosa habría sido diferente. Pero recordemos que incluso llegaron a cancelar varios terminales que tenían en desarrollo, como el filtrado hace unos días, conocido como Lumia 750.